A menudo, los propietarios de empresas pueden pasar por alto la importancia de invertir en medidas preventivas, considerándolas gastos innecesarios. Sin embargo, es crucial comprender que la inversión en prevención es significativamente menor en comparación con los costos exorbitantes asociados con una demanda legal.
Las demandas no sólo implican costos monetarios directos como honorarios legales y posibles indemnizaciones, sino que también conllevan una carga emocional, tiempo y recursos que podrían destinarse de manera más productiva al crecimiento del negocio.
Los abogados de negocios sabemos que la antigua sabiduría de que «prevenir es mejor que curar» resuena fuertemente en el mundo de los negocios, donde la prevención no solo es más sabia sino también más económica.
Proteja su negocio de posibles demandas
Como cualquier emprendedor de Florida sabe, una demanda siempre implica una posibilidad de perder. No pretendemos ser negativos, solamente exponer tal situación como una posibilidad perfectamente plausible en toda situación de demanda.
Es por ello, que el mejor de los planes, es tomar los recaudos necesarios, de manera proactiva, como para que dicha demanda, así como también todos los costos involucrado con la misma, no tenga lugar.
Una demanda no justifica nunca el gasto involucrado, y podría evitarse en muchos casos con la correcta implementación de medidas preventivas.
¿Cómo evitar las demandas?
Aunque es imposible prever cada eventualidad, existen estrategias y prácticas efectivas que pueden ser implementadas para reducir significativamente el riesgo de enfrentar demandas legales.
La importancia de los acuerdos comerciales
Un buen comienzo para evitar demandas sería contar con todos los acuerdos comerciales por escrito. ¡Un apretón de manos ya no es suficiente! Un acuerdo cuidadosamente redactado por su abogado de negocios es la mejor manera de abordar cualquier problema legal que pueda surgir en el futuro.
Alternativas de resolución de disputas
Asegurar que cualquier acuerdo comercial estipule exactamente cómo se resolverán las disputas que surjan es muy importante. Opciones como la mediación o el arbitraje podrían ser invaluables cuando se trata de evitar una costosa batalla legal.
La mediación implica la intervención de un tercero imparcial, el mediador, cuya función es facilitar la comunicación entre las partes en conflicto. Este enfoque colaborativo busca encontrar soluciones que satisfagan a ambas partes.
Uno de los aspectos destacados de la mediación es su carácter confidencial. Las discusiones durante la mediación no pueden ser utilizadas en procedimientos legales posteriores, lo que fomenta un ambiente abierto y honesto.
A diferencia de un tribunal, las partes tienen un control significativo sobre el resultado del proceso de mediación. Pueden llegar a acuerdos que se ajusten a sus necesidades y prioridades.
La mediación generalmente es más rápida y menos costosa que los procedimientos judiciales. Al centrarse en la resolución temprana, las partes pueden evitar largos litigios y mantener relaciones comerciales más saludables.
En el arbitraje, las partes en disputa eligen a una persona o un panel de árbitros para resolver el conflicto. Estos árbitros son generalmente expertos en el área relacionada con la disputa.
Aunque más estructurado que la mediación, el arbitraje suele ser menos formal que los tribunales tradicionales. Las partes pueden acordar reglas y procedimientos adaptados a sus necesidades.
Tener un abogado de derecho comercial para ver un acuerdo antes de firmarlo debería ser otro paso para evitar problemas legales posteriores.
Identificar áreas de riesgo suceptibles de demandas
La prevención de demandas comienza con un examen minucioso de los rincones y recovecos de un negocio.
Examina detenidamente todos los documentos internos, contratos, políticas y procedimientos. Asegúrate de que estén actualizados y cumplan con las regulaciones legales vigentes.
Las áreas de recursos humanos son a menudo puntos críticos. Asegúrate de que las políticas de contratación, despidos y relaciones laborales cumplan con las leyes laborales locales y federales.
Verifica que la empresa esté cumpliendo con todas las obligaciones contractuales. La falta de cumplimiento puede ser un punto de conflicto potencial.
Gestión de quejas de clientes
Las quejas de los clientes podrían ser el comienzo de un problema legal, por lo que es de suma importancia prestar atención y mantenerse al tanto de ellas en todo momento, procurando resolverlas. A menudo, comprometerse e involucrarse son lo mejor para el negocio y mucho más económicos, a todas luces, que acudir a los tribunales.
Considera las quejas como oportunidades para obtener feedback constructivo. Pregunta a los clientes sobre posibles soluciones y mejoras que podrían implementarse.
Analiza las quejas de manera regular para identificar patrones o problemas recurrentes. Abordar las causas subyacentes contribuirá a evitar quejas futuras similares.
¿Necesita un abogado de derecho comercial?
Como ya hemos mencionado, ser proactivo en la prevención de demandas es otro paso que deben tomar los propietarios de pequeñas empresas. Identificar cualquier área del negocio que podría dejar al propietario expuesto a un juicio, es la mejor manera de ser proactivo. En este punto un abogado de derecho comercial es el profesional indicado.
En el equipo de MRK International Law sabemos que, más allá de la prevención, un abogado puede ofrecer orientación estratégica. Desde la identificación proactiva de áreas de riesgo hasta la asesoría en la resolución de disputas, contar con un experto puede marcar la diferencia en la toma de decisiones empresariales.