
Gracias a la globalización y los avances tecnológicos, el comercio electrónico se ha vuelto bastante popular hoy. Con la disponibilidad de diversos canales de comunicación y transporte, la compra de productos en el extranjero se ha convertido en una práctica muy común. Tanto los minoristas como los consumidores están optando cada vez más por obtener productos directamente del extranjero, haciendo el producto mucho más asequible.
Sin embargo, por muy bueno que resulte comprar productos en el extranjero, esta operación también conlleva una buena cantidad de desafíos. De la misma forma en que usted puede tener problemas con los vendedores locales, este también puede ser el caso con los socios internacionales. De hecho, las compras internacionales tienden a ser más complejas debido a la diferencia en las operaciones comerciales y los marcos legales en los diferentes países.
Si surgiera una disputa entre un comprador y un vendedor, debido a que los bienes no se entregaron según lo planeado, o la calidad no es la prometida, puede ser difícil reclamar una empresa con sede en otro país. Y es por eso que resulta fundamental firmar siempre un acuerdo internacional porque le ofrece protección legal en tales casos.
¿Qué es un contrato internacional?
Un contrato tiene muchas formas. El tipo más común es el escrito y firmado por ambas partes. Además, se puede establecer un contrato cuando un vendedor acepta recibir el pago por un producto / servicio de un comprador. Aunque no existe un acuerdo por escrito, este sigue siendo un contrato. Sin embargo, la disponibilidad de un documento escrito es una prueba tangible que se puede utilizar para hacer un reclamo legal por bienes no entregados, dañados o de baja calidad.
No podemos enfatizar lo suficiente la importancia de acordar un contrato por escrito al hacer negocios a nivel internacional. Debido a la existencia de tratados firmados entre países, un contrato internacional otorga poder a un comprador en otro país para demandar a una empresa en un destino extranjero por el incumplimiento de las disposiciones del contrato.
Un buen ejemplo de un tratado fuerte que existe es el entre los Estados Unidos y el Reino Unido. En el pasado se han aplicado estrictas políticas para salvaguardar las relaciones comerciales internacionales. Y tanto los compradores como los vendedores deben seguir estas políticas.
Desafíos en el comercio internacional
Como se mencionó anteriormente, descuidar el uso de contratos internacionales al comprar productos es riesgoso. Entonces, incluso si ha trabajado con un proveedor durante años, no envíe el pago sin firmar los formularios de contrato. Y como la mayoría de los compradores no tienen los recursos para ejecutar un contrato, el vendedor siempre es responsable de ello.
Ahora bien, ¿qué dificultades existen al momento de firmar contratos con otros países?
Cada país tiene sus propias prácticas comerciales y culturas empresariales únicas. Lo que puede considerarse una práctica estándar en un país puede ser completamente inusual o incluso inaceptable en otro. Estas diferencias pueden incluir normas de calidad, procedimientos de pago, plazos de entrega y condiciones de garantía.
Por ejemplo, un vendedor puede estar acostumbrado a un período de pago de 30 días, mientras que el comprador internacional puede esperar pagar al contado al momento de la entrega.
Las leyes y regulaciones comerciales varían significativamente de un país a otro. Esto puede complicar las transacciones comerciales internacionales y aumentar el riesgo de incumplimiento contractual. Por ejemplo, las leyes sobre la protección del consumidor, los impuestos sobre las importaciones y exportaciones, y los derechos de propiedad intelectual pueden diferir entre países y pueden influir en las negociaciones y en la redacción de contratos.
Ante este panorama, ¿qué podemos hacer? Contar con un abogado internacional.
Bufete de abogados internacionales en Miami
Si usted es un individuo o una empresa que experimenta alguno de los problemas anteriores, nuestro bufete de abogados internacionales está disponible para brindarle asistencia legal. Con sede en Miami, Florida, contamos con una amplia red de abogados internacionales en los principales mercados del mundo. Nos enfocamos en brindar acuerdos internacionales y resolver disputas relacionadas con negocios.
¿Por qué trabajar con nosotros?
Estamos orgullosos de contar con un equipo de abogados internacionales con experiencia que se especializan en derecho comercial y contractual. Gracias a nuestro amplio conocimiento del derecho contractual en varios países, nuestro despacho de abogados internacionales puede garantizar transacciones seguras y protegerlo de sorpresas no deseadas.
Al trabajar en su contrato con clientes internacionales, nos aseguramos de que cumpla con las leyes locales e internacionales. Tanto los compradores como los vendedores pueden acceder a nuestra asistencia experta para comprender y elaborar los términos y condiciones.
Las diferencias de idioma y cultura empresarial son las principales causas de disputa en los negocios internacionales. Pero todo esto puede evitarse trabajando con un estudio jurídico internacional o con un bufete de abogados que comprenda la importancia de los contratos internacionales.
Aventurarse en un mercado extranjero requiere una comprensión adecuada del derecho contractual internacional. A diferencia de Estados Unidos, donde las transacciones se realizan a través de canales de comunicación móvil.
En otras partes del mundo, la mayoría de las culturas prefieren los negocios cara a cara. Es probable que el uso de su enfoque habitual en un mercado extranjero provoque algunos contratiempos aquí y allá. Y es por eso que necesita ayuda profesional.
Unas palabras de precaución: Antes de firmar un contrato con cualquier empresa extranjera, es fundamental realizar una verificación de antecedentes y asegurarse de que la empresa esté debidamente registrada y autorizada para operar en el país. Esta información es vital porque hay menos posibilidades de tener problemas cuando se trata de una empresa de renombre.