
Sabemos que la mayoría de las empresas buscan optimizar y reducir los costos operativos. Estos costos, al momento de ser estudiados, se relacionan con los servicios legales, que son tomados por abogados de negocios. ¿De qué manera?
Se pueden trabajar los costos de dos maneras:
- Equipo propio: un abogado o equipo de abogados de negocios dentro de la empresa.
- Terciarización de los servicios legales: a través de un estudio jurídico.
Departamentos legales dentro de la empresa
Como hemos mencionado, existen dos opciones al momento de trabajar servicios legales de los costos administrativos. Una de esas opciones es mantener un departamento legal dentro de la empresa, muy utilizada en empresas grandes y lujosas, y otra opción es la contratación de un bufete de abogados en un estudio jurídico.
Lo cierto es que, mantener un equipo de trabajo de abogados de negocios internacionales dentro de la empresa resulta sumamente elevado. Es por esto que, las empresas de alta facturación pueden hacerlo.
Sin embargo, también es importante aclarar que estos departamentos legales suelen ser de poco personal, por lo que la carga de trabajo resultará alta. Cuando esto ocurre, el riesgo de ineficiencia resulta cada vez mayor, por la cantidad de trabajo que ocupan.
Beneficios de contratar un estudio jurídico
Existen cantidad de razones por las cuales comenzar a trabajar con un estudio jurídico puede ser la mejor opción. Nombraremos algunas de ellas a continuación:
Ahorro de costos
En la mayoría de los negocios, lo que se busca es el ahorro de los costos mientras que se consigue una mayor eficiencia en las operaciones. Contratar un bufete de abogados y tercerizar los servicios legales es una forma de hacerlo.
Gracias a un equipo de trabajo profesional, conseguiremos no sólo bajar nuestros costos administrativos, sino que se profundicen las problemáticas a resolver, y así lograr un mejor resultado en las operaciones de la empresa. Además, al momento de delegar estos trabajos podremos enfocar ese dinero a tarifas más competitivas para los clientes.
Resolución de problemas
Al contratar un equipo de especialistas en negocios internacionales, también contaremos con la ayuda para resolver aquellos inconvenientes que se puedan presentar debido a las prácticas comerciales de nuestro negocio. Un estudio o despacho de abogados internacionales en Miami nos brindará tranquilidad y resguardo en estos temas tan complejos.
Es muy importante, a su vez, que el equipo de abogados a contratar, pueda proporcionarnos liderazgo y confianza, ya que estaremos delegando responsabilidades.
Asesoramiento en negociaciones
Al momento de negociar con otra empresa, debemos tener muy en claro todos los derechos y responsabilidades legales. Desde contratos hasta leyes, las negociaciones deben ser respaldadas por un abogado.
La tarea que cumple en estos casos un abogado internacional es sumamente importante, ya que debe informarnos y explicarnos cómo funcionan las negociaciones con nuestros próximos socios comerciales o inversores. Asimismo, un abogado podrá redactar términos y condiciones en contratos, acuerdos de asociación y artículos de incorporación comercial.
Es indispensable que en las decisiones comerciales se encuentre un abogado especializado que conozca la legislación fiscal, contratos de trabajo y compras de bienes, entre otros.
Adaptación a cambios del mercado
La flexibilidad en el uso de servicios legales es fundamental para las empresas que enfrentan cambios rápidos en su entorno operativo. Por ejemplo, una empresa de tecnología que lanza un nuevo producto puede enfrentar una serie de regulaciones relacionadas con patentes y propiedad intelectual. Si la demanda del producto supera las expectativas, puede requerir asesoramiento legal adicional para proteger su invención a medida que crece su base de clientes.
O también consideremos una startup en el sector de fintech que desea expandirse a nuevos mercados internacionales. En lugar de mantener un equipo legal interno con experiencia en cada país, la empresa puede asociarse con un bufete que tenga oficinas en esos mercados o con abogados locales. Esto les permite escalar sus servicios según la necesidad, manteniendo la agilidad en la ejecución de su estrategia de expansión sin incurrir en costos fijos elevados asociados con un equipo interno completo.
Costos asociados a la escalabilidad
La capacidad de escalar servicios legales también se traduce en una gestión de costos más eficiente. Una empresa que enfrenta una crisis legal inesperada, como una demanda, puede necesitar un equipo legal más grande por un corto período. Si tuvieran un departamento interno, tendrían que pagar salarios fijos y beneficios a un grupo de abogados que quizás no se necesiten una vez resuelta la situación. Al contratar un estudio jurídico, pueden solicitar recursos adicionales solo durante el tiempo que lo requieran, optimizando así su presupuesto.
Imaginemos una empresa de construcción que, en un año, gana un contrato grande y necesita asesoría legal para cumplir con regulaciones locales y de seguridad. En lugar de contratar a varios abogados para el año completo, pueden colaborar con un estudio jurídico que ofrezca un equipo temporal para este proyecto específico, permitiendo que la empresa mantenga su flexibilidad financiera.
Estudio Jurídico Internacional
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